Mandalas: ¿Por qué círculos?
“Un mandala es una estructura íntegra
organizada en torno a un centro unificador”
~Longchenpa~
La palabra Mandala
proviene de una lengua clásica de la India que se desarrolló hace más de
2,300 años: el sánscrito. La traducción más simple y menos estricta de
MANDALA sería CIRCULO SAGRADO, haciendo referencia a mucho más que la
simple forma geométrica. Más allá de lo obvio de la misma traducción, te
has preguntado ¿por qué la forma básica de los mandalas es el
círculo?, ¿por qué no se ha elegido cualquier otra figura como forma de
meditación, filosofía y espiritualidad tan arraigada y duradera?. Esta
no ha sido una asignatura hecha al azar.... tiene su origen, estudio y
profundo significado y justificación. Para comprenderlo hablaremos un
poco de puntos y círculos; círculos porque como ya mencionamos son la
base geométrica del mandala, y puntos porque de ellos nace el círculo.
El punto (·) representa el potencial de creación. En sánscrito se le denomina bindu y es un símbolo del Universo y su forma aún no manifiesta. Y un bindu es el punto central del mandala, el punto primordial a través del cual lo no manifiesto se manifiesta.
El
estudio del mandala puede considerarse como un viaje circular de
descubrimiento, un viaje que inicia y termina en el punto central. Si
colocamos un compás sobre una hoja y lo hacemos girar en torno a un
punto central, un círculo de infinitos puntos nacerá ante nosotros, y
esto es la base del patrón mandálico.
El círculo es considerado el
primer hijo del punto, y a partir de el se logran crear todas las
formas. Lo curioso es que el concepto del punto es una mera ilusión, ya
que no puede medirse. El punto es una designación o símbolo para algo
que no es definible y es por ello que se considera una ilusión. El punto
es un concepto que existe en ese espacio-tiempo que llamamos infinito y
que a pesar de todo es una certeza sin la cual la creación no sería
posible; los puntos existen en todas partes, en todo momento. Son
puertas que se abren hacia lo desconocido, que nos conducen a un viaje
al interior del corazón del mandala y fuera de el, simbolizan un centro
infinito, ese punto central es el lugar desde el cual el círculo, o el
“Uno”, es creado. La forma básica del círculo es conocida como Unidad, y
es el padre de todas las formas.
La expresión de la naturaleza
infinita del punto no se detiene en el Uno. Un despliegue magnifico y
multifacético de formas continúan generandose desde el circulo infinito,
a través del desdoblamiento del mandala.
El patrón que
sigue el mandala es un centro entorno al cual giran otros elementos.
Esto es un reflejo que encontramos en todos lados, desde el átomo
alrededor del cual giran partículas, hasta el Sol entorno al cual giran
los Planetas, las ondas en el agua creadas por el golpe de una gota de
lluvia al caer, el iris de nuestros ojos, las puntas de nuestros dedos,
el “ojo de calma” del huracán es el centro alrededor del cual gira la
espiral, los anillos de crecimiento en el tronco de un árbol y los copos
de nieve por solo mencionar algunos de los ejemplos que nos muestran el
punto central alrededor del cual se crea un mundo confluyendo; esto nos
lleva a pensar acerca de la naturaleza misma de los patrones. La sabia
naturaleza es la primera en mostrarnos la repetición, utilidad y la
estabilidad que proporciona un patrón mandalico. La existencia de un
centro, en torno al cual gira el resto de componentes de una Unidad es
esencial para que cualquier organización o estructura se desarrolle
exitosamente. Es la estructura fundamental desde la que nacen tanto la
realidad material como la filosófica.
Mandalas en la Naturaleza |
Es
así como el círculo cobra importancia y notoriamente se manifiesta en
toda la vida. Nuestra búsqueda del centro, la fuente, el punto o momento
primigenio, nos ha llevado al descubrimiento de una pequeña parte
dentro del todo, por ínfimo o gigante que parezca. En el macrocosmos,
buscamos descubrir las relaciones con el todo, mientras que en el
microcosmos de nuestras vidas personales ésta búsqueda adquiere la forma
de un viaje de aprendizaje y autoconocimiento como partes integrales de
la totalidad de diseño de la vida, donde nosotros somos ese bindu
alrededor del cual se crea el mandala de nuestra existencia.
Observa, ¿cuantos Mandalas
logras ver a tu alrededor?, identifica todo lo que en tu cuerpo, en el
ambiente que te rodea y en la naturaleza cerca de ti, presente un patrón
mandálico... tal vez te sorprendas con lo que ves ;)
“Cada impulso de cada electrón, pensamiento o espíritu es
una Unidad Activa dentro del Universo Entero”
~El Libro de Urantia~
FUENTE http://www.esenciadelser.com
Comentarios
Publicar un comentario