El espejo
Imagina que existiese un espejo que reflejara todas tus características negativas, todos los impulsos reactivos que viniste a transformar a este mundo.
Ahora supón que rompieses el espejo en mil pequeños pedazos; cada uno de ellos reflejaría una característica negativa distinta de tu naturaleza. Ahora supón que esparcieras los pedazos por todas partes.
¿ Sabes qué pasaría entonces ? Que todas las personas nocivas que hay en tu vida, todas las situaciones y obstáculos negativos a los que te enfrentas o eres testigo en las noticias de la noche, todas las cosas que ves mal en los demás, son solamente pedazos adicionales de ese espejo.
Cada fragmento refleja un fragmento diferente de tu propia personalidad. Cuando corrijas y transformes un aspecto particular de tu personalidad, un fragmento del espejo reflejará esa transformación. Entonces comenzarás a ver los aspectos positivos de los demás y las situaciones comenzaran a cambiar para mejor. Las personas se volverán más amables, más afectuosas, más atentas y más genuinas. Y lo más asombroso es que el mundo externo cambiará de forma tangible.
No serás únicamente observador y testigo sino protagonista y creador del cambio. Cuando una masa crítica de personas viven la vida de esta manera, el cielo será en la tierra.
Recuerda que todo en tu vida está ahí por una sola razón: para ofrecerte la oportunidad de transformarte. La transformación es la única manera de efectuar un cambio positivo en tu vida y en este mundo. No sigas desperdiciando energía encontrando fallos en los demás. Comienza la transformación desde adentro. Comienza a buscar las situaciones incomodas en tu vida y evita los caminos fáciles. La Luz la encontrarás en las aguas turbulentas de tu vida. ¿ Por qué ? Porque los mares agitados generan reacciones.
Ciertamente, durante un tiempo será turbulento. Al principio te dará bofetadas por todos los lados, pero si te mantienes sólo con la certeza de que te están probando y no reaccionas, los mares se cambiaran rápidamente. Será entonces cuando experimentes una extraordinaria Luz que ha estado intentando llegar a ti y que siempre ha permanecido a tu lado
Excelente!!!, que bonito fuera si tan solo por un día existiera un espejo así, donde pudiésemos mirar nuestro verdadero yo, ese que no queremos ver, ese que nuestro ego impide avanzar hacia la verdadera existencia. Para que la humanidad toda entera comprenda que hemos venido aquí para crecer espiritualmente y en realidad vamos hacia todo lo opuesto a ese principio, todos nos perdemos en el afán de bienes materiales, sin ser apenas consientes que nada de ello nos acompañara en nuestro viaje eterno y por ende todo ello es superfluo, caty
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