El velo de opacidad y el porque no nos entendemos en esta tercera densidad, por David Topi
Una de las partes más duras de navegar
por esta tercera densidad es la imposibilidad de vernos los unos a los
otros como realmente somos. Debido al traje orgánico, al cuerpo que
usamos en cada encarnación, tenemos la facilidad y la habilidad de
esconder, de manera natural e inconscientemente, todo lo que llevamos a
cuestas a nivel emocional, mental y espiritual, y ni siquiera aquellas
personas clarividentes son al 100% capaces de ver a una persona como
realmente “ES” a nivel de la esencia que encarna en ella.
Es una característica pensada para el
trabajo evolutivo que se ha de hacer en este “curso” en el que estamos,
pero es una característica que a mi, personalmente, me fastidia. Me
fastidia porque me parece que es la causa de que no seamos capaces de
entendernos directamente, y de que la humanidad tenga que recurrir a
juicios, opiniones, comentarios y análisis los unos de los otros para
tratar de llegar a percibir o comprender lo que el resto de nosotros
hace, dice o simplemente “es”.
El velo de opacidad
Se que forma parte del juego, y que es
algo inevitable. La tercera densidad se caracteriza por ser el nivel
evolutivo más duro para nosotros (en otros lados – planetas-, parece
ser, es mas “light” porque el “diseño” evolutivo de las etapas o
densidades es ligeramente diferente, y se hace más trabajo en otros
niveles más elevados, que, a priori, nosotros completamos en niveles
inferiores), ya que la configuración escogida por este sistema donde
estamos encarnando es una configuración de alto libre albedrio pero alto
“velo” de opacidad respecto a densidades superiores. Es decir, no
tenemos ni idea de que tenemos por delante porque no podemos percibir el
rango frecuencial de la siguiente densidad (la cuarta), y por ende,
todo lo que podemos hacer son conjeturas, montar nuestros sistemas de
creencias, y discutir los unos con los otros sobre todo ello ya que
nadie lo puede percibir realmente.
En otros sistemas, parece ser, la cosa
es muy distinta, el velo de opacidad que nos bloquea la percepción
sensorial de los siguientes niveles evolutivos es mas fino, por lo que
entidades que encarnaran en un planeta 3D más light, podrían y pueden
percibir semi-claramente el siguiente nivel, el cuarto, así como desde
el cuarto se puede percibir el quinto, y desde el quinto el sexto. Aquí,
solo los habitantes de la segunda densidad son semi-conscientes de los
habitantes de la tercera (los animales y plantas de los seres humanos),
pero los seres humanos no tenemos ni idea de que hay más allá del curso
evolutivo en el que estamos. Incluso los que perciben a personas
fallecidas, entidades de luz, monstruitos del astral y demás están
percibiendo solo seres de nuestra misma tercera densidad, simplemente
perteneciendo a los llamados planos internos o planos no físicos del
planeta en el que estamos.
Juzgando a los demás, opinando, analizándolos, montando nuestra propia película
Claro. No es de extrañar que, cuando
tenemos que interactuar los unos con los otros, debamos usar las
funciones sensoriales y cognitivas que tenemos a nuestra disposición: lo
que vemos, lo que sentimos y lo que oímos de esos otros. Luego debemos
interpretar esas señales, energías, palabras y sensaciones percibidas, y
luego debemos analizarlas, decodificarlas, ver si tienen sentido para
nosotros, si cuadran en nuestra realidad, y si entonces esa persona está
“en sintonía” y nos resuena lo que hace, dice o “es”, o está en las
antípodas de todo ello. Cuanto más difícil se nos hace discernir a la
persona como realmente es en esencia, más conjeturas y más análisis,
juicios de valor y opiniones nos formamos, porque menos información
“real” tenemos para juzgar algo o alguien. Por otro lado, cuanto más
despiertos y conscientes de nosotros mismos estamos, y menos programas
automáticos ejecutamos, mas fácil se nos hace percibir si otra persona
es también consciente de ella misma o va en piloto automático con alguna
de las múltiples facetas del carácter y personalidad activadas que
todos generamos.
Básicamente si pudiéramos percibirnos
como realmente somos, no generaríamos arquetipos de la personalidad para
lidiar con el día a día, y con el resto de la humanidad. No nos haría
falta. Seriamos transparentes los unos a los otros y la comunicación
seria de “esencia “ a “esencia”, probablemente no de alma a alma porque
seguiríamos teniendo la barrera del cuerpo por medio, pero la
comunicación y el entendimiento entre personas seria 1000 veces superior
al nivel en el que nos encontramos actualmente. Y ya no hablo de
desconocidos con los cuales tienes que hacer un esfuerzo triple para
ubicar, diseccionar y encontrar la forma de interactuar, sino de nuestro
propio entorno cercano, familiar, social o laboral, con los que tenemos
que lidiar cada día.
Todo sea por el aprendizaje
A mi, que queréis que os diga, me
fastidian estas barreras. Me fastidia tener que explicarme o usar mis
arquetipos de la personalidad en vez de que se me pueda percibir como
soy, y se me pueda leer directamente a nivel emocional y mental, pero no
tengo forma de librarme de este traje que ocupo (tampoco tengo
intención de ello ya que es mi vehículo para mi evolución en este nivel
en el que todavía estoy) así que lo único que puedo hacer es buscarme la
vida para ser lo más transparente posible desmontando mis programas
automáticos, mis patrones de comportamiento y mis facetas de la
personalidad que solo existen porque vivo en un entorno denso y
energéticamente ciego a lo que tiene alrededor, porque debo usar
palabras en vez de “Gestalts” (comunicación en forma de bloques de
información, donde se transmite todo sobre un concepto a la vez, como se
hace en todos los siguientes niveles frecuenciales) y porque debo hacer
lo imposible para entender la esencia de una persona sin juzgarla por
sus arquetipos de personalidad y programas de comportamiento. A veces lo
consigo, y soy capaz de ver cuando alguien está ejecutando un cierto
patrón o programa, y con ello ya me libero de tener que reaccionar como
lo haría si no fuera consciente del mismo (reaccionando con el mismo
programa automático, por convención social o por reacción instintiva del
carácter), pero no es así para casi ninguno de nosotros en la mayoría
de los casos.
Como siempre, todo forma parte del
aprendizaje, a más difícil se hace entendernos los unos a otros, mas
empeño y esfuerzo hay que poner para ello, con lo cual, mas lecciones,
habilidades y cualidades adquiere uno y desarrolla en si mismo, lo cual
repercute en la rapidez evolutiva con la cual se completa el paso por
esta tercera densidad. No hay mal que por bien no venga. Pero eso solo
funciona si tienes la base de conocimiento de que esto es así por diseño
evolutivo, porque así se escogió que fuera para este planeta donde
hemos decidido venir a encarnar y que nosotros hemos aceptado estas
reglas del juego. Muchas otras “almas” están en otros sistemas
planetarios 3D más “ligeros” (y probablemente más de servicio a otros,
positivos a nivel de polaridad de sus habitantes de tercera densidad).
Cuando vas a ciegas, y no sabes porque vas a ciegas (ni siquiera te
planteas que estás yendo a ciegas), es cuando se genera todo el
conflicto, discusión, juicios de valor, opiniones enfrentadas,
descalificaciones, o simplemente rechazo de todo aquello que no
concuerda con tu visión de ir a ciegas, que no es otra cosa que la
realidad personal de cada uno de nosotros.
Menos mal que tenemos a nuestros guías
La falta de perspectiva sobre las cosas,
el no percibir a las personas, cosas, eventos, etc. de forma
completamente objetiva, ya que no podemos hacerlo debido a la cantidad
de filtros que tenemos, hace que necesitemos ayuda “externa” de aquellos
que no están sujetos a esta ceguera temporal, es decir, de aquellos que
no están imbuidos en un cuerpo físico. Y por eso tenemos a todas las
entidades que llamamos guías espirituales para ayudarnos a navegar por
la realidad. Nada queda al azar en el juego de la creación, y cuando hay
“ciegos”, pues hay perros lazarillos (con todo mi cariño para nuestros
guías Registros Akashicos David Topí ) que son los únicos capaces de ver
en perspectiva las cosas desde la verdadera esencia de las mismas. Si
no fuera por nuestros guías, incluyendo nuestro propio Yo Superior,
iríamos mucho mas perdidos por esta realidad, porque no tendríamos
cierta información, intuición y apoyo para indicarnos cuando estamos
leyendo la realidad de forma completamente errónea a como se leería si
no tuviéramos este velo de opacidad insertado.
Esto, afortunadamente, es solo una
característica de este curso. Cuando el planeta se termine de sacudir
toda su carga energética 3D STS, cuando la carga energética 4D STO que
pulula ya por los planos no físicos se integre y active a nivel físico
en el planeta, y tengamos el nuevo nivel evolutivo listo para ser usado y
la vida 3D haya completado su ciclo, estaremos listos para interactuar
de otra forma. De forma totalmente transparente los unos con los otros.
Un nuevo vehículo, una nueva realidad común
El traje físico que usaremos en el
siguiente nivel evolutivo, a priori, dependerá de las necesidades del
planeta para trabajar con las energías de esa nueva cuarta densidad que
le llegan externamente desde todos lados (el cuerpo que usamos ahora es
originariamente diseño del planeta para cubrir las necesidades de
recepción y anclaje de energías 3D). Pero si es correcto, a “grosso
modo”, lo que algunas fuentes 4D, 5D o 6D nos dicen (por ejemplo todas
las publicaciones de LL Research como La Ley del Uno o las miles de
páginas de transcripciones de “Qu’o” a través de Carla R. Rueckbert, lo
publicado por Barbara Brodksy, o incluso por Michael Topper, o las
transcripciones de Laura Knight y su experimento Casiopea) una vez hemos
pasado de nivel evolutivo en el que estamos ahora todo sistema
planetario se convierte en la semilla de lo que se llaman “complejos de
memoria social”, es decir, un sistema en el cual todos los que están
encarnados en un planeta 4D o superior están conectados entre si de
forma consciente, y se perciben los unos a los otros completa y
transparentemente, poniendo sus recursos energéticos y mentales a
disposición del complejo de memoria social (del conjunto de entidades
que lo forman), sin perder por ello la individualidad como tal,
simplemente teniendo acceso al vasto conjunto de recursos que supone la
información y el conocimiento disponible en todos y cada uno de los
individuos y entidades que están conectados a ese complejo social.
El inconsciente colectivo como recurso común de información
Nosotros ya tenemos nuestra propia
versión de un complejo de memoria social, es nuestro inconsciente
colectivo, pero no tenemos acceso consciente al mismo ni lo sabemos usar
para el beneficio de todos (pero si que se puede manipular para
beneficio de unos pocos y mal del resto), debido precisamente a ese velo
de opacidad que nos impide ver mas allá de la realidad física y
tangible en casi todos los casos. Pero que no lo veamos no significa que
no esté, todos estamos conectados con todos (que no es lo mismo que
decir que todos somos “uno”, eso es algo que a nivel metafísico solo
ocurre cuando se produce la reintegración en el “TODO” en la séptima
densidad), y toda la información de lo que nos sucede a todos, lo que
sucede al planeta y lo que ha sucedido está en ese inconsciente
colectivo (parte de lo que también se llaman Registros Akashicos
planetarios), pero como usamos cuerpos muy limitados en sus funciones,
eso queda fuera de nuestro alcance en casi todos los casos.
Dos opciones
Aun así, decía, todos ya estamos
conectados los unos con los otros, ahora solo falta que podamos o bien
dar el salto evolutivo cuando nos toque para usar un traje que nos
permita percibir la información de nuestro campo morfogenético y usarlo
para el bien mayor de todos o bien desmontar y trabajar con el traje
actual que llevamos (el cuerpo físico) para eliminar lo máximo posible
el filtro que lo impide, disminuir su grosor, desmontar los automatismos
que lleva incorporado y ser lo más transparentes posible como forma de
existir en esta tercera densidad.
Conozco personas que han dado la batalla
por perdida y que esperan simplemente al siguiente nivel evolutivo para
mostrarse como son, porque no tendrán mas remedio y porque perciben que
la humanidad como tal no está por la labor de modificar esta realidad
conjunta, y conozco personas que intentan implantar las cualidades y
características del siguiente nivel evolutivo ya en el tiempo que les
queda de existencia en este (los años o las vidas que les falten). Ambas
opciones son legitimas y ambas opciones dependen solo de nuestro libre
albedrio. Al final, es todo cuestión de perspectiva, y siempre
tendremos, aunque vayamos ciegos por la vida, a nuestros perros
lazarillos (si les hacemos caso) para echarnos un cable con todo el amor
y la dedicación que poseen, pues forma parte del diseño evolutivo de
este y otros sistemas planetarios el que, en esta tercera densidad, no
percibamos nada de lo que tenemos por delante. Y lo queramos o no, hemos
aceptado las reglas del juego, por mucho que, a veces, no nos acordemos
de ellas y realmente, nos fastidien.
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