Transformaciones

Transformaciones
Como el mar en calma a veces necesita de las tormentas. Como la luz necesita de la oscuridad para transformarse. Transfórmate. Libérate.
No depende de ti el cambio en los demás. Solo de ti mismo/a y de aquellos dispuestos a cambiar. Si alguien no está dispuesto al cambio, el mundo se ha paralizado para sí.
El cambio es la constante. Evita la parálisis. Fluye. Ve hacia donde debes ir.
Tú no necesitas salvarte. Pues eres tu propia salvación. Cada paso que das te transforma. Te salva y te hunde para renacer. Pues cada paso es un cambio. Una nueva vibración que se auto experimenta a través de ti. Todo lo que se estanca debe partir.
Abre los ojos. Mira a tu alrededor. ¿Dónde está el cambio? ¿Dónde está la luz? Hacia allí debes ir.
Todo cumple su ciclo. Debe morir para renacer. Así en todo. Desde la más pequeña partícula hasta el más vasto universo. Siempre transformándose a sí mismo.
La verdadera comprensión es la total transformación de uno mismo. Así seamos una partícula o un universo. Siempre debemos transformarnos. Es el descubrimiento constante. Eso es EVOLUCIÓN.
No es evolución entender algo y quedarnos con ello.
La evolución con periodos de latencia, es la partícula necesaria para seguir adelante. Cuando el círculo, la rueda, vuelve a girar hay que subirse al cambio. Con la adrenalina de lo inesperado. Con el sabor de los nuevos descubrimientos.
Todos tenemos que aprender y enseñar todos nos interrelacionamos todos creamos y cocreamos la unidad desde la aparente separación.
Todos participamos del cambio, aun desde el aparente estancamiento.
Pero cuando la rueda echa a andar, debemos permitirnos la sorpresa del cambio. Cuando el ciclo se termina se abre uno mayor. Y el aprendizaje aparece más complejo.
Por eso nos sumimos en la comodidad de permanecer. Así el cambio inexorablemente llega, todo lo arrasa, integrando nuestra consciencia más allá de la libertad, el dolor, las concepciones. Todo es uno y esa es la real independencia.
¿Qué hay más allá? Primero aprende a lidiar con lo que tienes aquí y ahora.
Que tu sabiduría te guie a ser el puente a la sabiduría de otros.
Los que duermen despertarán. Procura estar despierto/a para recibirlos. Lo demás es ilusión. Transforma la realidad. Transfórmate.
Eres la semilla. Tienes el poder de sembrar el cambio. Pero la responsabilidad del florecimiento está en cada ser.
A veces sostener el no-cambio implica detener el cambio. Retrasar la evolución.
Todo son elecciones, lo sabes. Todo es parte de lo que deciden. Están ahí para ello. La forma fluye en base a lo que deciden. Todo es perfecto. Si quieres cambiarlo, puedes. Es tu vida. Es tu elección. Es tu libertad. Es tu misión. No es la misión de nadie más.
Tamara Gallego

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